martes, 23 de octubre de 2012

Perdón y olvido

"Es por eso que nosotros invertimos una fortuna en medios. Creo que a través de los medios masivos podemos hacer llegar la voz a mucha gente, crear opinión de que debemos practicar el perdón, pues sin perdón no hay olvido. No podemos vivir en un país donde no haya perdón ni reconciliación".
Jorge H. López
En entrevista de Prensa Libre del 21 de octubre.

Al finalizar la lectura de la entrevista no puedo evitar los múltiples cuestionamientos que, atropellados, acuden a mi mente:
Si una mujer es victima de la violencia intrafamiliar, ¿la solución es que perdone y olvide?
Las esposas de los pilotos de unidades de transporte público, ¿deben enseñar perdón y olvido en el corazón de sus hijos huérfanos?
Mi vecino, que sostiene a su familia con su negocio de fletes ¿debe llenar el plato de sus hijos con perdón y olvido para los delincuentes que le robaron su vehículo?
¿Mis hijos deben aprender a perdonar y olvidar a los delincuentes de cuello blanco que elegimos cada cuatro años? Sin importar cuanto hayan robado, ni cuanta miseria generan a su paso.
¿Debo perdonar y olvidar los abusos de mis socios y amigos en los negocios, en el matrimonio, en la escuela? Y no ponerle punto final a sus desmanes.
Si la norma para vivir pacíficamente en sociedad es el perdón y no el respeto por el derecho ajeno, ¿para que gastamos tanto dinero en tribunales de justicia? ¿Para qué tanto esfuerzo por legislar?
¿Será que el perdón es bueno para la democracia y el olvido es mas importante que la república?
Y, si el perdón y el olvido son las metas, ¿cuál es el propósito de amenazar al pecador con el infierno?
¿Será que siempre debe prevalecer el valor del perdón sobre el valor de la justicia?

2 comentarios:

Edgar Madariaga dijo...

Parafraesando a Ayn Rand mi querido amigo, el pedir perdón y misericordia para el victimario es cometer una injusticia en contra de la victima.

Un abrazo a la distancia !

P.S deberías de publicar más seguido, blogs como el tuyo me mantienen cerca de mi club favorito de lectura

Rodrigo Polo dijo...

Muy buen punto, yo siempre he creído que si algo entorpece el desarrollo de la libertad en estos países es la cultura de agachar la cabeza, de olvidar y sobre todo de la pereza de pensar y aceptar lo que diga cualquier otra persona con falso positivismo sin siquiera cuestionarlo, buen post!