Somos lo que hacemos día a día. De modo que la excelencia no es un acto, sino un hábito. Aristóteles.
viernes, 9 de octubre de 2009
Aperto libro
El retrete hipócrita
Las tazas del váter (inodoro) en los cuartos de baño modernos se elevan del suelo como flores blancas de nenúfar (ver imagen). El arquitecto hace todo lo posible para que el cuerpo olvide sus miserias y el hombre no sepa qué pasa con los residuos de sus entrañas cuando rumorea por encima de ellos el agua violentamente salida del depósito. Los tubos de la canalización, aunque llegan con sus tentáculos hasta nuestras casas, están cuidadosamente ocultos a nuestra vista y nosotros no sabemos nada de la invisible Venecia de mierda sobre la cual están edificados nuestros cuartos de baño, habitaciones, salas de baile y parlamentos.
Leído en: La insoportable levedad del ser, Milan Kundera
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
3 comentarios:
¡Uyyyy! que malcriadote el cundera! mejor sería sobre la Venecia de flores!
Oiga maestro, fíjese que no puedo leer su blog. Creo que el color del fondo se confunde con el de las letras. ¿O será que yo tengo daltonismo?
Salú pue.
Hahahahahaha, está bueno lo de la Venecio enmierdada. Suerte.
Publicar un comentario